Mexicana se encuentra inmersa en un proceso de concurso mercantil, que se rige bajo las normas de la Ley de Concursos Mercantiles. En la etapa en que se encuentra, el proceso se conduce bajo la tutela del Conciliador designado para el caso.
El tiempo para las negociaciones esta determinado por la misma ley y finaliza con una sentencia judicial emitida por el juez competente.
Los acuerdos alcanzados con las partes interesadas han permitido que se avance en el proceso de concurso mercantil, sin embargo, es relevante decir que la empresa entró al concurso mercantil por tener un modelo de operación insostenible; lo que implica que la empresa requiere de capital y de un modelo de negocios sostenible en el mediano y largo plazo para que pueda retomar sus operaciones.
El Gobierno Federal ha facilitado las acciones para que las personas interesadas lleguen a los acuerdos necesarios en el concurso mercantil. No obstante, la empresa requiere de capitalizarse para poder seguir adelante con el proceso de obtención del Certificado de Operador Aéreo, necesario para iniciar sus operaciones.
En este contexto, los esfuerzos que ha realizado la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), para lograr un acuerdo que permita que Mexicana reanude operaciones, no pueden siquiera cuestionarse, tan es así, que como en su oportunidad se hizo del conocimiento de la opinión pública, se consiguieron acuerdos que, en lo laboral, permitirían que bajo un nuevo modelo de negocios, la aerolínea pudiera reiniciar operaciones sin contratiempos.
Ejemplo de lo anterior, es el hecho de que desde el 8 de diciembre de 2010, se concretaron los convenios bajo los cuales los diferentes sindicatos y la empresa, pactaron nuevas condiciones de trabajo que hicieran viable la operación, estos nuevos proyectos de contratos colectivos de trabajo, quedaron bajo el resguardo del propio Secretario del Trabajo y Previsión Social, en espera de que se concreten el resto de los acuerdos.
Por otra parte, la STPS siempre vigiló que las liquidaciones a los trabajadores, se hicieran conforme a la normatividad laboral y que, en la medida de lo posible, se recontratara al mayor número de personal y que, gradualmente, se incorporaran más trabajadores y también que se colocara a otros en diversas aerolíneas.
Por su parte, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes ha venido a avanzando con total apego a la normatividad vigente en el proceso de recertificación de las capacidades técnica, financiera, jurídica y administrativa, condiciones necesarias, por ley, para emitir el certificado de operación aérea y autorizar el reinicio de vuelos de la empresa en un contexto de responsabilidad y sustentabilidad en el corto, mediano y largo plazo.
La STPS continuará vigilando el cumplimiento de la Ley Federal del Trabajo en el caso de Mexicana, como en todos los demás de su competencia, debiendo destacarse que absolutamente todos los derechos de los trabajadores se mantienen intactos y debidamente protegidos.
Por su parte, la SCT continuará vigilando el cumplimiento de la normatividad de aeronáutica civil. En la inteligencia de que, conforme se avance en el proceso de concurso mercantil, se pueda proceder con la acreditación de las capacidades que por ley los inversionistas deben acreditar para poder operar una aerolínea.
En suma, cabe destacar que en los aspectos laboral y aeronáutico, que son la competencia de la STPS y la SCT, absolutamente todos los flancos quedaron cubiertos.
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