Álvaro González Muñoz, presidente del Frente Nacional de productores y Consumidores de Leche, precisó que la petición al nuevo titular de ese organismo de la Secretaría de Salud es que acabe con los productos piratas lácteos, elaborados con fórmulas importadas con la anuencia de Bruno Ferrari, secretario de Economía".
El dirigente dijo que, además de que este esquema de comercialización es un fraude, sobre todo para familias de escasos recursos, es también una competencia desleal para más de 200 mil auténticos productores de leche del país, afectados en su economía por la entrada al mercado mexicano de leche adulterada.
El líder lechero aseguró que los quesos, yogures, cremas y mantequillas, son fabricados a partir de sueros a los que se les agrega una serie de supuestas vitaminas, minerales, proteínas e incluso melamina, que, esta última, puede ser mortal para humanos y animales".
En entrevista, González Muñoz destacó que los sueros que se importan no son supervisados en su calidad y contenido por la Secretaría de Salud, dependencia federal que solamente confía "de palabra" en la buena voluntad de importadores, procesadores y comercializadores.
Asimismo, dio a conocer que anualmente entran a México más de 500 mil toneladas de leche y sus derivados. Tan sólo el año pasado cruzaron nuestra frontera norte, 220 mil toneladas de leche en polvo y, el resto de esas compras, correspondió a quesos, sueros, yogures, grasas butíricas, mantequillas y cremas, entre otros productos.
"Estos alimentos provenientes del exterior, explicó, se han convertido en fuerte competencia para los productores mexicanos de leche y sus derivados, sobre todo porque esas importaciones llegan respaldadas con fuertes subsidios en sus países de origen, en algunos casos hasta del 60 por ciento, lo que saca de la competencia a los productores mexicanos.
El dirigente acusó a la Secretaría de Economía de emitir normas oficiales que abren espacios para que estos productos se puedan comercializar en el país.
González Muñoz manifestó que esta rama productiva tiene la esperanza de que el nuevo comisionado de COFEPRIS ejerza sus funciones adecuadamente y empiece por regular el mercado de la leche, garantizando así a los consumidores del lácteo y sus derivados, que no son adulterados.
En tanto, expresó, las organizaciones de productores de leche cerrarán filas para presionar a las autoridades competentes, a través de movilizaciones y reuniones programadas, para exigir a esas autoridades la inmediata regulación del mercado.
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